El proyecto RELAQ (Registro Latinoamericano de Pacientes Quemados) liderado por la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), será desarrollado mediante una plataforma tecnológica de registro, llevada a cabo por el ITiSB de la Universidad Andrés Bello. Su ejecución tendrá como plazo dos años, con un costo de 2.925 UF, e incluirá a nueve países del continente latinoamericano a través de once centros.

La Dra. Carla Taramasco, directora del Instituto para la Innovación en Salud y Bienestar UNAB (ITiSB) y quien lidera el equipo de profesionales que desarrolla este programa, explicó que “Coaniquem lidera, por experiencia y recursos el registro de niños y jóvenes quemados con información acerca de tratamientos y seguimientos de los pacientes en Chile y Latinoamérica. Por ello, desde el ITISB-UNAB tenemos la misión de desarrollar esta plataforma que permitirá contar con datos específicos, como número de pacientes, tipos de quemaduras, estrategias, ingresos, cirugías, tratamientos, control, seguimientos, llegando hasta su alta clínica”.

También permitirá detectar cuellos de botella como país, ayudar en la investigación y en la búsqueda de procedimientos más eficaces“, añadió la profesional. 

Importancia de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado

En este sentido, es importante recalcar que Coaniquem, desde hace cuarenta y cuatro años, mantiene como objetivos el logro de la rehabilitación integral de niños y adolescentes que han sufrido quemaduras, así como prevenir, capacitar e investigar en todas las materias referentes a las patologías derivadas de los casos presente. Además, actúa en conjunto con las familias, organizaciones y la sociedad, entregando tratamientos completos, de calidad y totalmente gratuitos.

Igualmente, un eje fundamental de la organización se dirige hacia el bienestar emocional y espiritual del usuario, promoviendo una mayor conciencia dentro de la comunidad respecto a esta problemática, mejorando la calidad de vida de quienes integran la fundación.

Finalmente, la Dra. Carla Taramasco agregó que “como equipo tenemos el gran desafío de construir este registro de información integrada, normalizada y estandarizada, que será una herramienta importante para aportar en mejores decisiones, ayudando en el diseño y construcción de nuevas políticas públicas dentro del territorio nacional y en América Latina. Tan sólo en Chile, más de ochenta mil niños se queman anualmente y en muchos casos esta dolorosa experiencia los acompañará durante toda su vida”.